Hay muchas cosas buenas y útiles en el ministerio juvenil, otras que no aportan al cumplimento de la Gran Comisión. Una cultura en la que el joven es solamente un espectador que depende del líder o pastor para que sus amigos escuchen el Evangelio. Una cultura en la que el joven no toma iniciativa para compartir el Evangelio y depende de que la iglesia organice eventos o reuniones para hablar de Jesús son culturas que no aceleran la expansión del Reino de Dios.
Comencemos a cambiar esa cultura con estos 4 pasos:
- Ora pidiéndole a Dios un cambio de cultura.
- Modela el estilo de vida.
- Dale espacio de oración de intercesión a los jóvenes.
- . . . Mira este video donde Gustavo explica cada punto