En muchas de las ocasiones que escucho a alguien compartir el Evangelio me percato que usualmente enfatizan una parte del mensaje y limitan o eliminan otras. Esto usualmente depende de la personalidad de la persona y su experiencia en la fe.
Muchos hablan apasionadamente de como nuestros pecados son aborrecidos por Dios y nuestro riesgo de castigo eterno si no ponemos nuestra fe en Jesús. Otros, hablan con mucha compasión y le quieren hacer ver a las personas el amor de Dios como la razón principal por la que deben poner su fe en Jesús.
Y aunque ambos son ciertos uno debería complementar al otro. En el video de hoy Gustavo González nos da un simple acróstico que nos ayudará a recordar el mensaje completo del glorioso Evangelio.